martes, 10 de mayo de 2016

Mis sensaciones tras diez semanas entrenando

Y ya van 10 semanas, ¡quien lo diría!

Parece que fue ayer cuando empecé a sumar kilómetros, y ya estoy casi a mitad de camino de mi reto, para el cual ya he decidido ponerle fecha. El día D será el 14 de agosto de 2016.

Han pasado 2 semanas desde mi última entrada sobre mis sensaciones entrenando, pero han pasado muchas cosas:

  • la novena semana, semana de transición pensada para que las piernas puedan asumir el trabajo previo, me salió con menos entrenamientos de lo que me hubiese gustado. Todo por culpa del cansancio acumulado de los viajes por trabajo y, no voy a negarlo, de los 30kms del domingo de la 8a semana (mi, hasta ahora, tirada más larga).
  • la décima semana, en Santiago de Compostela, ha sido dura por varios motivos:
    • los primeros días fueron días de mucho calor (termómetros con hasta 31oC), con lo mal que habitualmente he llevado estas altas temperatutas,
    • los siguientes días ha llovido más que mucho (esto no voy a negarlo, casi casi lo he agradecido ;) ),
    • ha sido mi primera semana de 2 sin pasar por casa (fin de semana incluido), estando lejos -muy lejos, ¡demasiado lejos!- de mi mujer y mis hijos,
    • algunos problemas en el ámbito laboral están contribuyendoo a "mejorar" aún más mi ánimo,
    • me consta que molesté mucho a alguien en twitter, y no supe hacerle entender que todo era un problema de interpretación de mis palabras.
    Y sin embargo, no puedo decir que haya sido una mala semana de entrenamientos, ya que me han salido 60kms (algo menos de lo que me hubiese gustado, eso es cierto), habiendo recuperado los 5 entrenos semanales, y habiendo acumulado un total de (según Strava) algo más de 1000m de desnivel positivo (y negativo, claro está, que todas mis rutas son circulares ;) ).

Y para los que puedan pensar: "¡qué nos importa tu estado anímico, aquí hemos venido a leer de entrenamientos!", un apunte: en cualquier reto relacionado con la resistencia, está claro que es necesario cuidar y entrenar nuestro físico, pero no hay que menospreciar la importancia que va a tener nuestra mente en la consecución de nuestra meta. Por ello es importante tener la capacidad de entender cómo nos sentimos día a día, y por qué nos sentimos de ese modo, para encontrar una salida. Y ese entrenamiento de nuestra fortaleza mental nos ayudará, el día en que finalmente afrontemos nuestro desafío, a lograr superarlo.

Por ello creo que, si estando con el ánimo "en horas bajas" he seguido saliendo a entrenar y ha salido una buena décima semana, el 14 de agosto, si todo sigue igual, podré superar -no sin mucho esfuerzo, eso está claro- mi Desafío GR-100.

No dejes de visitar www.facingmychallenges.com para estar al tanto de las últimas novedades.

No hay comentarios:

Publicar un comentario